El "Torreón"
Cerca de Sangarcía se encuentra Velagómez, un rancho ganadero, actualmente propiedad del marquesado del mismo nombre. El caserío fue heredero de un antiguo despoblado que esconde, entre establos, los restos de una pequeña iglesia de origen románico y en ladrillo, de advocación desconocida. Allí se la conoce por "el torreón".
El templo, románico en origen, no es sino un triste espectáculo en ladrillo y mampostería. A pesar del uso al que se le relegó, el de aprisco para ganado, en propiedad privada, conserva su cabecera completa y un ábside en el que se abren tres pequeños vanos.
Debió de tratarse de un pequeño edificio de una sola nave que puede perfectamente intuirse cuando se accede al recinto donde se encuentra. Aún sigue protegido por su pequeña bóveda, desafiante al paso del tiempo. Una sorpresa que puede no tardar en desaparecer.
Fue el aspecto exterior de la ruina, con la base en piedra y totalmente acabado en ladrillo, lo que lo hizo merecedor del apelativo de "El Torreón".